Sin algún avance significativo, aun así la Jornada Mundial de la Juventud trajo un cambio ambiental tangible para la presencia de personas LGBTI en la Iglesia Polaca

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Por Marcin Dzierżanowski – Periodista Polaco, activista del Grupo Cristiano Polaco LGBTI Wiara i Tęcza (Fe y Arcoiris).

“El Papa Francisco predica el Evangelio, y el Evangelio es para todos. El Encuentro Mundial de la Juventud es una fórmula abierta, de la cual los homosexuales también están invitados a formar parte”, manifestó el Padre Piotr Studnicki, vocero del Cardenal Stanisław Dziwisz, varios días antes del arribo del Papa a Polonia. El Cardenal Dziwisz, por largo tiempo uno de los asociados más cercano al Papa Juan Pablo II en el Vaticano y Metropolitano de Cracovia tras su muerte, mantiene una posición de importancia en Polonia y es gracias a sus esfuerzos que Cracovia se convirtió en la ciudad sede del Encuentro Mundial de la Juventud 2016.

Es una pequeña maravilla por lo tanto que, las palabras del vocero del Cardenal Dziwisz, se hubieran esparcido como un fuego salvaje por todo el mundo mediático de Polonia. En Polonia, la declaración, que no hubiera causado tal impacto en Europa Occidental o en USA, cayó como una bomba. Hasta ahora, la jerarquía Polaca no ha hablado en términos positivos de las personas LGBTI o han reconocido la presencia de homosexuales, bisexuales y transgéneros entre los hijos fieles de la Iglesia. Muy por el contrario, los últimos años han evidenciado una serie de declaraciones no favorables de los representantes de la Iglesia respecto a las personas LGBTI, en muchos casos enmarcadas en el contexto de discusiones referentes a la mal llamada “Ideología de Género”. Una atmósfera no amigable en la Iglesia es amplificada por el entorno político. En términos de estatus legal para personas LGBTI, Polonia parece estancada justo en el medio de Europa Occidental y Oriental. Mientras que las organizaciones LGBTI han estado operando libremente, aún no hay reconocimiento legal para para las uniones del mismo sexo. Esta situación es agravada por la ascensión al poder, a fines del año pasado, por la Derecha Política relacionada a la retórica de la Iglesia Católica local.

Enfrentando tales antecedentes, cualquier forma de invitación o acogida a homosexuales en la Jornada Mundial de la Juventud pareciera ser una luz tenue de esperanza. Sin lugar a dudas, esto es resultado del trabajo de Wiara i Tęcza (Fe y Arcoíris), Grupo de Cristianos LGBTQ Polaco que han estado activamente abogando por la mejora de la situación de las personas LGBT en la Iglesia Polaca, desde el anuncio del Sínodo de la Familia por el Papa Francisco. Uno de los alcances de dicha actividad fue reunir las respuestas de 130 Católicos LGBT, de toda Polonia, respecto a su situación en la Iglesia. Un resumen de estas respuestas fue enviado a los representantes de la Conferencia Episcopal Polaca. Miembros de Fe y Arcoíris se reunieron también con varios obispos, incluyendo al previamente mencionado Cardenal Dziwisz y sus dos obispos auxiliares. Uno de estos jerarcas fue el Obispo Damian Muskus, el coordinador general de los preparativos para la Jornada Mundial de la Juventud en Cracovia. Este encuentro tuvo relación con la preparación de un mayor evento para la juventud en la JMJ.

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En la iniciativa de Fe y Arcoíris, junto con el Foro Europeo de Grupos Cristianos LGBT, un Refugio para Peregrinos LGBT se abrió durante la JMJ. Durante varios días, en uno de los Cafés de Cracovia, voluntarios atendieron un punto informal y pastoral donde peregrinos homosexuales, bisexuales y transgéneros pudieron orar juntos, ver las transmisiones de las celebraciones centrales con el Papa y compartir sus experiencias de vida. El programa incluyó reuniones con sacerdotes y psicólogos, talleres de trabajo, debates, exhibición de películas y espacios de adoración, tanto Católica como ecuménica. Invitados especiales al Refugio fueron el pastor Jim Mulcahy, coordinador de Europa Oriental para las Iglesias de denominación Comunitaria Metropolitana de U.S. locales; Brendon Fay, activista de derechos humanos y cineasta de Nueva York; y el dr Michael Brinkschröder, teólogo Católico y psicólogo de Múnich, además activista del “Foro Europeo de Grupos Cristianos LGBT”.

“La Jornada Mundial de la Juventud reúne a personas, cada ciertos años, en alguna de las ciudades más grandes del mundo. Hasta ahora, la única JMJ donde una iniciativa de espacio seguro para peregrinos LGBT fue organizada ocurrió en Colonia el 2005. Pensamos que sería una gran idea hacer algo similar en Polonia”, explica Misha Cherniak, uno de los coordinadores del proyecto. “El Obispo Damian Muskus fue informado de nuestros planes y lo destacó de una fraternal manera. De todas formas, nos advirtió, que no había posibilidad de incluir nuestro proyecto en el programa oficial de la JMJ.”.

“Durante los seis días de funcionamiento del Refugio, tuvimos entre 50 a 60 visitantes”, dice Artur Barbara Kapturkiewicz, uno de los co-fundadores de Fe y
Arcoíris que estuvo también activamente involucrado en el proyecto del Refugio.
“Estuvimos muy felices de ver a tantos jóvenes peregrinos. Para muchos de ellos, esta fue la primera ocasión para compartir sus problemas de reconciliación entre su fe y ser personas LGBT. Además de los Polacos, recibimos peregrinos de Alemania, Inglaterra, Rusia, China y Canadá. Nuestros visitantes estuvieron particularmente interesados en la revisión de una lectura no discriminatoria de las Escrituras o el taller de trabajo sobre la Divina Misericordia.  Adicionalmente celebramos la Eucaristía juntos”, señala Artur Kapturkiewicz. “Gozamos del cuidado pastoral de sacerdotes Católicos Romanos simpatizantes y ministros de otras denominaciones Cristianas”, añadió.

Desafortunadamente, las expectativas de algunas personas de la comunidad LGBT de que el Papa se disculpará por los pecados en contra de homosexuales, bisexuales y transgéneros nunca se concretaron. Aunque habló extensivamente de las personas excluidas y marginadas, falló en mencionar explícitamente a las personas LGBT. A pesar de esto, en su última homilía refiriéndose a Zaqueo, destacó tres barreras que un creyente debe superar en el camino a Cristo. Estas palabras fueron notablemente relevantes para las personas LGBT.

El primero de estos obstáculos es la pequeñez de estatura. El Papa dijo que algunas veces “no sentimos lo suficientemente grandes, porque no nos consideramos a nosotros mismos dignos”. El segundo obstáculo es la vergüenza, Zaqueo “sabía esto, al tratar de trepar ese árbol, que se volvería un hazmerreir para todos. Aun así supo manejar su vergüenza, pues la atracción por Jesús fue más poderosa”. El tercer y final obstáculo que el Papa enumeró fue la resistencia de las personas en torno a Cristo. “Era la queja de la multitud, la que primero lo censuró y luego lo criticó: ¡Cómo podría Jesús haber entrado a su casa, la casa de un pecador!” dijo el Papa.

Para el Grupo Fe y Arcoíris de Cristianos LGBT Polacos, la experiencia de la Jornada Mundial de la Juventud y el Refugio para Jóvenes Peregrinos, abierto durante la JMJ, fue en los hechos un acto de superación en lugar de una limitante. Juzgando por el alto interés que los peregrinos y la prensa tuvieron en el proyecto y por el tono positivo general de la mayor parte de los comentaristas, Fe y Arcoíris alcanzó este desafío exitosamente.

Para una perspectiva alternativa sobre la experiencia de las actividades en el Refugio para Peregrinos LGBTI, lean el Artículo de Michael BrinkschroederConozcan también sobre la experiencia de un joven peregrino en la JMJ en la Crónica de Eros Shaw.

WiT_smallWiara i Tecza (Fe y Arcoíris) es un grupo compuesto por Cristianos LGBTQ Polacos, sus familias y amigos.Cambiando la conciencia dentro de la Iglesia, WiT trabaja en pro de incrementar la tolerancia y a través de ello la aceptación en la sociedad entera, como también apoyar la gentileza entre las personas. La mayor parte de sus miembros son de denominación Católica Romana, pero WiT recibe cristianos de cualquier origen, en un espíritu ecuménico. WiT también invita a las personas, que son agnósticas o ateas, para un encuentro comunitario y de diálogo.